Vive dormida y duerme dormida. La dormilona tiene 27 años, está soltera y vive sola en un piso de alquiler en una gran ciudad. Pese al ruido que se cuela siempre por sus ventanas, no hay quien le quite el sueño profundo en el que vive. Odia madrugar y nadie le quita de una siesta, después de desayunar, después de comer, y después de cenar, justo antes de dormir.
En cuanto llega a casa, la dormilona corre a ponerse su bata, y bajo ella, un gordo pijama que le dé calor. Y por supuesto, sus zapatillas de casa. No le gusta tener frío en los pies.
Tiene los ojos cerraditos aún cuando está despierta. El pelo negro muy despeinado, porque al despertar tiene mucho sueño y le cuesta verse frente al espejo y peinarse. Es una compañera perfecta para dormir y tener dulces sueños, pero ojo, no le gusta nada que la despierten.
Si quieres disfrutar de maravillosos sueños con dormilona puedes tenerla por un precio de 15 euros. Mide 20 centímetros. Pídela en amigorumis@gmail.com
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